El gobierno municipal, por medio de la Oficina de Asuntos Étnicos, y en el marco del proyecto: “apoyo a las acciones integrales dirigidas a los pueblos indígenas Sikuani, Hitnu e Inga del municipio de Arauca, componente implementación de una estrategia integral de rehabilitación para los indígenas adictos al consumo de sustancias psicoactivas municipio de Arauca”, viene desarrollando actividades para la mitigación del consumo de sustancias de origen natural o sintéticas, mediante la ocupación del tiempo libre.
Es así, como este proceso se realiza a través de actividades lúdicas, deportivas, artísticas, recreativas, educativas y artesanales, en articulación con diferentes instituciones de la ciudad capital. Por ello, en la mañana de este miércoles 18 de octubre, los profesionales de Asunto Étnicos en trabajo en equipo con Coldeportes Arauca, llevaron a cabo una jornada de recreación acuática en la Piscina Fondepa, con una duración de aproximadamente tres horas.
Cabe explicar, que esta acción fue integral pues con antelación a la actividad en mención, la administración municipal brindó un espacio para que los indígenas tuvieran la oportunidad de gozar de una higiene personal.
En el momento, el proyecto cuenta con la presencia de 16 indígenas en condición de calle, y con problemas de adicción a sustancias adictivas. Así mismo, la alcaldía de Arauca está dando cumplimiento a la restitución de derechos inmersa en la Tutela Segunda Instancia Tribunal Superior de Arauca Expediente 81-001- 31-04- 002-2014- 00052-03 (indígenas con consumo de SPA y habitabilidad en calle).
Entre tanto, Claudia Arrieta, una de las indígenas líderes del proceso y quien superó el uso de sustancias sintéticas, expresó: “la pasamos bien, porque los muchachos en estos momentos no están consumiendo, ojalá el tiempo de estas actividades no fuera tan corto. Así empecé yo, y al final ya no consumía por eso es bueno seguir haciendo esto. Invito a que nos unamos y que aceptemos que los muchachos necesitan ayuda y nuestros consejos,sin críticas, y que a nuestros líderes les falta mano dura con ellos al permitirles que hagan lo que quieran”.
Por su parte, Jhon Jairo Pérez, profesional del proyecto, dio a conocer: “es un trabajo difícil pero no imposible, es una labor que poco a poco la vamos llevando con paciencia, sabemos que no podemos entrar con fuerza a las comunidades, por eso la comunidad debe saber que no es apropiado darles dinero y tampoco tratarlos negativamente. El trabajo básico es tenerlos alejados de las calles, que ocupen su tiempo libre en actividades que permitan que se desarticulen del problema de la droga”.