El vicepresidente hizo el llamado a esta guerrilla, invitando a que se agilicen los diálogos en el proceso de paz que se está discutiendo en Quito, Ecuador
A pesar de que este viernes los negociadores del Gobierno y del Eln anunciaron el final del segundo ciclo de conversaciones, el vicepresidente general (r) Óscar Naranjo, aseguró que “si no toma decisiones pronto, el Eln se puede quedar del tren de la paz”, comentario que hizo como una invitación para que “entienda que hay una oportunidad histórica de poner el fin al conflicto con ellos y que termine su levantamiento en armas”.
Naranjo hizo las declaraciones durante el Congreso de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco). Allí también dijo que “la paz en Colombia será irreversible” y que “ningún colombiano sensato quiera volver a un conflicto armado”. En ese sentido, celebró que las Farc hubiesen dejado sus armas el pasado martes para “avanzar con paso firme para acabar con cinco décadas donde la muerte fue el sello dramático del conflicto”.
El vicepresidente también se refirió a la discusión que hubo en el Consejo de Seguridad, en el que este organismo de Naciones Unidas dio su apoyo a la instalación de una segunda misión de la ONU en Colombia. Aunque los representantes de los países miembros del Consejo celebraron la implementación, también manifestaron su preocupación por la seguridad de los miembros de las Farc, ahora que están desarmados.
“El acuerdo prevé, y así está pactado, que habrá condiciones de reincorporación para quienes decidieron dar el paso para la dejación de las armas y transitar a la vida legal y el Consejo Nacional de Reincorporación está trabajando en proyectos concretos. Algunos que tienen que ver con salida ocupacional, para que, por ejemplo, cerca de mil personas pertenecientes a las Farc se dediquen al desminado humanitario”, afirmó Naranjo.
También habló sobre la seguridad de los líderes y defensores de derechos humanos, y dijo que el Gobierno ya ha estado trabajando para garantizar su seguridad con varias estrategias: “la primera, que no haya impunidad (los responsables de cerca del 43 % de los 19 casos de este año, ya están en proceso de judicialización). La segunda, trabajando en prevención para no ser notarios de las muertes y anticiparnos, y por último, trabajando en los esquemas de protección”.
Con información de EL ESPECTADOR.COM