Un carro incinerado, comercios cerrados y calles desoladas dejó tercer día de paro armado en la capital araucana
A pesar de la presencia policial en la ciudad capital, la mayoría de los comerciantes optaron por cerrar sus negocios, ante el temor por las amenazas de sujetos que movilizaban en bicicleta.
El tercer día de paro armado en el municipio de Arauca, se vio marcado por el cierre de comercios, ante el temor de los propietarios; algunos de ellos intimidados por personas desconocidas que llegaban para exigir que se cerrara el establecimiento comercial. Durante las primeras horas de la mañana, la comunidad araucana exigió una mayor presencia policial y militar para resguardar la seguridad de los mismos ante los rumores de supuestos artefactos explosivos en la capital araucana. En el transcurso de la tarde, fue visible el aumento de la presencia de la fuerza pública en las calles de la capital.
A pesar de la presencia policial en la ciudad capital, la mayoría de los comerciantes optaron por cerrar sus negocios, ante el temor por las amenazas de sujetos que movilizaban en bicicleta. Esto ocasionó que se marcara la desolación en toda la ciudad; pues era poca la presencia de personas en la calle.
La tranquilidad de la comunidad araucana se vio alterada, cuando en horas de la tarde un vehículo fue incinerado en la vereda Santo Domingo, cerca al barrio Villa Luz.
Pasada la una de la tarde, Joaquín Eduardo Jiménez Montoya; propietario del vehículo, se dirigía a su finca cuando se encontró con dos hombres que se disponían a quemar una motocicleta. Seguidamente interceptaron el vehículo y procedieron a quemarlo, dejando partir a una atemorizada mujer que se movilizaba en la motocicleta.