La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha manifestado su preocupación debido al aumento en el cobro de extorsiones a organizaciones humanitarias en Colombia. A través de un comunicado en redes sociales, OCHA Colombia solicitó a los grupos armados facilitar un entorno seguro y libre de obstrucciones para el personal dedicado a la ayuda humanitaria.
“Observamos con preocupación una nueva tendencia que impide el acceso humanitario: el cobro de extorsiones a las organizaciones humanitarias. Llamamos a todas las partes en conflicto a respetar al personal humanitario y a las poblaciones en necesidad para que reciban la debida asistencia”, señaló OCHA Colombia en su publicación. (Póngalo en comillas en el WordPress)
Además, el Equipo Humanitario País (EHP) ha emitido un comunicado en el que critica esta práctica por ser inadmisible. Según el EHP, la extorsión a organizaciones humanitarias neutrales para permitir la asistencia a personas necesitadas ha sido notable, especialmente en departamentos como Arauca, Norte de Santander, Guaviare y Caquetá.
Esta situación afecta la continuidad de los servicios y asistencias humanitarias, incrementando el riesgo para la vida de los trabajadores y profundizando las desigualdades en el acceso a servicios básicos. En 2023, se registraron 240 incidentes que comprometieron el acceso humanitario, marcando un aumento del 51% respecto al año anterior, lo que incluyó amenazas y actos de violencia contra el personal y bienes humanitarios.
OCHA hace un llamado enfático a las partes conflictivas para asegurar un entorno que permita a los trabajadores humanitarios realizar su labor indispensable en todo el territorio colombiano, subrayando la importancia de mantener la ayuda a las comunidades más vulnerables.