El Gobierno Nacional ha intervenido otra Entidad Prestadora de Salud (EPS) en el occidente del país, lo que ha generado interrogantes entre la ciudadanía sobre el futuro de los servicios de salud. Julio Alberto Rincón Ramírez, Agente Interventor de la Nueva EPS, ha ofrecido claridad sobre la situación, asegurando que los servicios continuarán brindándose sin interrupciones.
Rincón Ramírez ha transmitido un mensaje de calma a los afiliados, enfatizando que la intervención por parte de la Superintendencia Nacional de Salud tiene como objetivo asegurar la no interrupción del acceso a servicios de salud esenciales. Durante este periodo, se ha solicitado paciencia mientras se realiza la administración transitoria, con un enfoque en mantener la cooperación con los proveedores de servicios de salud.
“Es fundamental que los prestadores de salud no usen a los pacientes como medio de presión. Estamos trabajando para actualizar los pagos pendientes”, afirmó Rincón. Asimismo, anunció la creación de una Sala de Crisis destinada a abordar aspectos críticos como la dispensación de medicamentos y el manejo de quejas, con el fin de implementar medidas correctivas rápidas.
Rincón Ramírez también hizo mención de la importancia de la utilización responsable de los servicios de salud, indicando que un aumento inesperado en la demanda podría sobrecargar el sistema. Invitó a los afiliados a reportar cualquier acto de corrupción, enfatizando la necesidad de una cooperación transparente y ética.
El interventor recordó que importantes cajas de compensación, el Gobierno Nacional y más de 11 millones de afiliados son parte esencial de la EPS, reafirmando su compromiso de no dirigir la entidad hacia la liquidación sino de fortalecer su función dentro del sistema de salud colombiano.