Colombia comenzó a sentir los efectos del paro del sector transportador, después que se mostraran indignados por la decisión unilateral del gobierno de aumentar el precio del ACPM en 6.000 peos de manera escalonada, con un incremento de 1.900 pesos desde el pasado sábado 31 de agosto.
Aunque los grandes gremios de transportadores han sido críticos no han anunciado una movilización masiva, pero dejaron ver su respaldo a las pequeñas empresas de vehículos de cargas o a título particular por parte de los propietarios de camiones.
Reclaman que estuvieron 13 meses negociando con el gobierno, pero sólo se apeló a su fórmula.
Además de la posición del gremio, también en el Congreso de la República criticaron el aumento del costo del diésel y no ven coherente equiparar el costo nacional con el internacional, para justificar el subsidio, porque en el país hay producción.
Frente a las manifestaciones que, en el caso de Bogotá generaron un caos vial mayor al acostumbrado, el gobierno se vio obligado a reunirse e instalaron un Puesto de Mando Unificado (PMU), en el cual estuvieron presentes la ministra de Transporte, María Constanza García; del Interior, Juan Fernando Cristo; de Minas, Andrés Camacho; de Hacienda, Ricardo Bonilla; y de Justicia, Ángela María Buitrago.
En todo el país se registraron 46 concentraciones, plantones u otras situaciones relacionadas con los propietarios o conductores de vehículos de cargas, 11 de ellos fueron bloqueos de vías.
Miguel Cardoza Cadenas – Corresponsal Meridiano 70 en Bogotá