El municipio fronterizo de Arauquita, en el departamento de Arauca, fue escenario de un nuevo acto de violencia que ha conmocionado a la región. El sábado 1 de marzo, alrededor del mediodía, un grupo armado ilegal irrumpió en el caserío de la vereda El Oasis, secuestrando a dos mujeres: Mary Luz Pérez Osorio y su hija, Erika Tatiana Aguirre Pérez.
Testigos informaron que los hombres armados llegaron al lugar y, frente a la comunidad, identificaron a las dos mujeres antes de llevárselas con rumbo desconocido. Este acto ha generado indignación y temor entre los habitantes de la zona, quienes denuncian que este tipo de situaciones se han vuelto recurrentes en medio del conflicto armado que afecta a la región.
La noche del mismo sábado, la comunidad realizó una protesta para rechazar estos actos violentos y exigir el respeto a la vida e integridad de los civiles. Los vecinos describen a Mary Luz y Erika Tatiana como personas trabajadoras y honradas, sin vínculos con grupos armados, lo que aumenta la preocupación por su seguridad.
La situación se torna aún más dramática al conocerse que Erika Tatiana es madre de dos niñas de 12 y 13 años, quienes ahora esperan angustiadas el regreso de su madre y su abuela. Este hecho ha llevado a los familiares de las secuestradas a solicitar la intervención urgente de organismos como la Personería, la Defensoría del Pueblo y entidades humanitarias internacionales.
Las autoridades locales han iniciado las investigaciones correspondientes, mientras que la comunidad y organizaciones de derechos humanos hacen un llamado a los grupos armados para que respeten el Derecho Internacional Humanitario y liberen de inmediato a las dos mujeres.