La reforma laboral vuelve al centro del debate legislativo en Colombia, esta vez en la Comisión Cuarta del Senado, donde fueron radicadas dos ponencias que reflejan visiones opuestas sobre el rumbo de la agenda laboral del país. El proyecto, revivido recientemente por la plenaria, enfrenta ahora una carrera contrarreloj: debe superar sus cuatro debates antes del 20 de junio para evitar un nuevo archivo.
Por un lado, se encuentra la ponencia mayoritaria, que mantiene cerca del 80 % del articulado aprobado previamente en la Cámara, pero introduce modificaciones clave, como posibles excepciones al recargo nocturno para microempresas. Estos ajustes han sido rechazados por el Gobierno, que considera que desvirtúan el espíritu del proyecto.
Por otro lado, la senadora Aída Avella, en representación del Ejecutivo, radicó una ponencia alternativa que busca retomar los elementos centrales de la propuesta original del Gobierno Petro. Entre sus puntos están el fortalecimiento de la formalización laboral, el aumento gradual de la licencia de paternidad, nuevas condiciones para contratos laborales y garantías para el sector rural. También contempla un incremento escalonado del recargo dominical al 100 % y la obligación para grandes empresas de contratar personas con discapacidad o asumir una cuota compensatoria.
La propuesta gubernamental, sin embargo, enfrenta un panorama legislativo adverso: no cuenta con mayorías claras dentro de la Comisión, lo que pone en riesgo su avance. Mientras tanto, la ponencia mayoritaria ha perdido respaldo del Gobierno y de sectores sindicales, que acusan a sus impulsores de modificar excesivamente el proyecto.
Pese a los obstáculos, el Ejecutivo insiste en buscar consensos para mantener lo que considera el núcleo de la reforma. Desde el Ministerio del Interior, el ministro Armando Benedetti reconoció la dificultad del momento, pero reafirmó la intención de avanzar con diálogo en el Congreso. Aunque sigue sobre la mesa la posibilidad de una consulta popular, el trámite legislativo sigue siendo decisivo para el futuro de la reforma laboral.