La reciente reunión del Comité Directivo del Fondo Multidonante de la ONU asignó 15.000 millones de pesos para avanzar en la implementación del Acuerdo de Paz en Colombia, enfocándose en desminado humanitario y emprendimientos productivos en las zonas más afectadas por el conflicto. Estos recursos permitirán realizar por primera vez actividades de desminado en áreas previamente inaccesibles por razones de seguridad. Además, se fomentarán iniciativas productivas de excombatientes, fortaleciendo la paz territorial y ayudando a reducir las brechas sociales que han contribuido al conflicto armado.
Durante el encuentro, el Gobierno Nacional presentó su Plan de Choque, con seis puntos claves, centrado en acelerar la transformación territorial mediante pactos y reformas rurales, fortalecimiento del sistema político, y gobernanza efectiva. Este plan es considerado esencial para cumplir con los compromisos del Acuerdo Final de Paz y garantizar una paz duradera en las regiones más golpeadas por el conflicto.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, afirmó que la transformación de los territorios será crucial para consolidar la paz, destacando la importancia de las subregiones PDET como foco de intervención para garantizar que los proyectos prioritarios generen el mayor impacto posible en estas zonas.
La comunidad internacional reafirmó su compromiso con la paz en Colombia, aplaudiendo los esfuerzos del gobierno por priorizar la implementación del Acuerdo. Además, el Sistema de Naciones Unidas y otros organismos, como el Banco Interamericano de Desarrollo, anunciaron que seguirán apoyando los procesos con recursos técnicos y monetarios.
Entre los aspectos destacados, la representante de Naciones Unidas, Mireia Villar Forner, reiteró el respaldo del organismo, asegurando que se brindarán los recursos necesarios para implementar medidas en beneficio de las comunidades más afectadas. La comunidad internacional también valoró la apertura de convocatorias para aceleradoras de emprendimientos que ayuden a consolidar la sostenibilidad económica en las regiones de paz.