Luego de 90 minutos llenos de intensidad, llenos de fútbol. Santa Fe no pudo voltear el marcador del partido en Ibagué. Ganó 2-1 este miércoles, pero el 2-0 del Murillo Toro todavía tiene celebrando a todo el departamento.
Tolima, a pesar de que estaba en ventaja, no se metió atrás en El Campín. Apenas iba minuto y medio cuando Wilfrido de la Rosa se perdió la primera opción para sentenciar la final. A partir de ahí, el juego se llenó de lucha, pero hubo que esperar al remate de la primera etapa para que esa avalancha de sudor se transformara en opciones de gol. Luis Carlos Arias estrelló un cabezazo en el horizontal. Luego, Róbinson Zapata detuvo con dificultad a Andrés Ibargüen, un jugador que hizo olvidar por 90 minutos a la representación tolimense en la Selección, Yimmi Chará. Después, el portero Burián achicó bien para taparle un mano a mano a Wílder Medina.
Santa Fe parecía alegrar a los cerca de 30.000 hinchas rojos (el estadio no se llenó) con un gol de Luis Carlos Arias, a los 42 minutos, con un remate dentro del área que pasó por encima del portero. Pero 60 segundos después, Tolima devolvió el golpe, en el mismo arco norte de El Campín, donde Heberto Carrillo, hace 33 años, metió un tiro libre a Junior para clasificar a la Libertadores. El héroe fue Ibargüen, quien aprovechó un mal rechazo de Yerry Mina para meter un fuerte tiro que empató el marcador.