El expresidente del Senado, Juan Diego Gómez, negó categóricamente cualquier relación con la red de corrupción en la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA) y rechazó las acusaciones que lo vinculan con Diego Marín, alias ‘Papá Pitufo’. A través de un comunicado emitido el 12 de febrero desde Medellín, el excongresista denunció que la Secretaría de Transparencia de la Presidencia de la República estaría detrás de una campaña de desprestigio en su contra.
“Este es un show mediático orquestado por el Gobierno Nacional para desprestigiarme”, afirmó Gómez en su declaración pública, agregando que no ha recibido “nunca dineros provenientes de algún miembro de la Policía Nacional en actos de corrupción”.
El exsenador señaló que la presunta campaña en su contra responde a una estrategia del gobierno de Gustavo Petro para desacreditar a sus opositores políticos. “Toda la ciudadanía sabe que he sido un firme opositor de las ideas de la izquierda. En mi gestión como presidente del Senado denuncié públicamente las artimañas y trucos empleados por la campaña de Gustavo Petro para alcanzar la Presidencia”, sostuvo.
Gómez también criticó la manera en que se dio a conocer la supuesta investigación en su contra, asegurando que fue a través de una animación en redes sociales, lo que a su juicio “vulnera el principio de legalidad y el derecho al debido proceso”. Enfatizó que la Secretaría de Transparencia no tiene facultades judiciales y que con estas actuaciones estaría extralimitando sus funciones.
Además, acusó al gobierno de usar estos señalamientos como un intento por desviar la atención de los diversos escándalos de corrupción que han marcado su administración. “Pretenden encontrar en falsas acusaciones contra sus opositores una excusa para tomar aire y perpetuarse en el poder, acudiendo a su mejor estrategia: la victimización, el señalamiento y la persecución política”, manifestó.
Finalmente, el excongresista anunció que su equipo jurídico tomará las acciones penales y civiles necesarias para contrarrestar lo que considera una campaña de difamación en su contra. “Estoy absolutamente tranquilo con mi accionar y, si es necesario, colaboraré con las autoridades competentes para esclarecer cualquier duda sobre mi nombre”, concluyó Gómez.
Con estas declaraciones, el exsenador deja claro que enfrentará legalmente la situación mientras insiste en que las acusaciones en su contra carecen de fundamento y buscan dañar su imagen pública.