La situación energética en Colombia se encuentra en un estado delicado debido a que los niveles de los embalses que suministran energía hidroeléctrica están por debajo del 50%. Expertos del sector advierten que, para esta época del año, estos niveles deberían superar el 60% para garantizar un suministro adecuado durante la próxima temporada seca.
Según José Castañeda, presidente de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (ACOLGEN), “la situación del sistema eléctrico colombiano es frágil. Los niveles actuales de los embalses son relativamente bajos para esta época, cuando normalmente se aprovecha para recuperar y almacenar agua de cara al verano que inicia en diciembre”.
Además, el aumento en la demanda de energía debido a las altas temperaturas ha incrementado el consumo eléctrico en el país. “En los últimos tres meses, el consumo ha pasado de 225 a 238 gigavatios hora por día”, señaló Castañeda. Este incremento se atribuye a las sensaciones térmicas elevadas en varias regiones, lo que lleva a un mayor uso de sistemas de refrigeración y ventilación.
Ante esta situación, la generación térmica ha cobrado mayor relevancia, aportando entre el 35% y el 40% de la energía consumida actualmente. “La generación térmica está produciendo aproximadamente 85 gigavatios hora por día, lo cual es crucial para evitar una mayor disminución de los embalses”, añadió el directivo.
Javier Bustos, director de Observadorescol, subrayó la importancia de incrementar la generación térmica para aliviar la presión sobre los embalses. “Recomendamos aumentar la capacidad de generación térmica a 120 gigavatios hora por día, como lo tuvimos en abril de este año. El objetivo es acumular suficiente agua de aquí a diciembre para atender la demanda energética entre enero y marzo del próximo año”, indicó.
Los generadores confían en que, con el apoyo de la generación térmica y si las lluvias se presentan de manera favorable en los próximos meses, los niveles de los embalses puedan recuperarse por encima del 65% para diciembre. Esto permitiría enfrentar la próxima temporada seca con mayor seguridad energética.
La situación también ha puesto de relieve la necesidad de diversificar las fuentes de energía en el país y fortalecer las inversiones en energías renovables no convencionales, como la solar y la eólica, para reducir la dependencia de las hidroeléctricas y las térmicas.
Las autoridades hacen un llamado a la población para hacer un uso eficiente de la energía y contribuir así a mitigar el impacto de esta situación. Se espera que en las próximas semanas se tomen medidas adicionales para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico nacional.