En vísperas del Día Internacional de la Mujer, ONU Mujeres ha publicado un informe contundente que revela un preocupante retroceso en los derechos de las mujeres a nivel global. Según el documento, uno de cada cuatro países experimentó un retroceso en los derechos de las mujeres durante el año 2024, lo que pone en riesgo los avances logrados en las últimas décadas.
El informe, titulado “Los derechos de las mujeres bajo examen, 30 años después de Pekín”, analiza los progresos realizados desde la adopción de la Plataforma de Acción de Pekín en 1995, un compromiso histórico de 189 países para promover la igualdad de género. Si bien se han logrado avances significativos en áreas como la educación de las niñas, la reducción de la mortalidad materna y la representación de las mujeres en los parlamentos, el documento advierte sobre un escenario de crecientes amenazas.
Entre los factores que contribuyen a este retroceso, el informe destaca la polarización política, que “agudiza cada vez más el riesgo y la realidad de una reacción violenta de género”. Los agentes contrarios a los derechos de género, según la ONU, están socavando activamente el consenso sobre cuestiones clave, tratando de bloquear o ralentizar la aplicación de leyes y políticas que promueven la igualdad.
A ello se suman los conflictos armados y las crisis humanitarias, que se han intensificado desde la pandemia del COVID-19, así como la emergencia climática y las nuevas tecnologías digitales, en particular la inteligencia artificial. Estas crisis y desafíos globales impactan de manera desproporcionada a las mujeres y niñas, aumentando su vulnerabilidad a la violencia, la discriminación y la pobreza.
El informe destaca que el 63% de las mujeres entre 25 y 54 años tiene un trabajo remunerado, frente al 92% de los hombres, y que más de 772 millones de mujeres trabajan en la economía informal, careciendo de protección social y enfrentando empleos más precarios.
Asimismo, se ha registrado un aumento del 50% en los casos de violencia sexual ligada a los conflictos desde 2022, siendo las mujeres y niñas el 95% de las víctimas. En 2023, 612 millones de mujeres vivían a menos de 50 km de alguno de los 170 conflictos armados que se registraban en el planeta, un 54% más que en 2010.
A pesar de este panorama sombrío, el informe también destaca que se lograron avances en la paridad en la educación de las niñas, la reducción de la mortalidad materna en una tercera parte y el aumento de la representación de las mujeres en los parlamentos. Sin embargo, las mujeres todavía tienen solo el 64% de los derechos que disfrutan los hombres.
En este contexto, ONU Mujeres ha presentado el nuevo Programa de Acción Pekín+30, una hoja de ruta ambiciosa con seis iniciativas para completar las tareas pendientes en materia de igualdad de género, incluyendo el acceso igualitario a la tecnología, la erradicación de la pobreza y la violencia, la participación en la toma de decisiones, la promoción de la paz y la seguridad, y la justicia climática. “Podemos ser la primera generación que viva en un mundo igualitario”, concluyen los autores del informe.