A pesar de no tener claridad sobre el costo y mediante bloques de artículos, la Cámara de Representantes avanzó en la reforma de salud. En un marco de casi ocho horas, se aprobaron 63 artículos y se descartaron ocho, es decir, se procesó el 49% del proyecto. De manera sorprendente, entre lunes y martes, la reforma progresó más que en los últimos cinco meses.
Este avance se consiguió gracias al respaldo de diversos grupos, incluido el Partido Liberal, que previamente había expresado preocupaciones sobre la propuesta.
Dicha rapidez en el proceso ha generado cuestionamientos legales sobre la validez de algunos procedimientos y ha puesto en alerta a expertos debido a ciertos artículos.
Los artículos 61 y 64, en particular, han llamado la atención. Están relacionados con el Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres) y su gestión de recursos. El 61 establece una cuenta administrada por Adres que centraliza fondos y permite su uso en diversos servicios. Expertos de Acemi señalan que este cambio podría centralizar y reorientar los recursos del Sistema General de Participaciones (SGP), afectando su finalidad original.
Por otro lado, el artículo 64 trata sobre los recursos gestionados por Adres, y hay inquietudes sobre la ampliación de su uso sin un aumento presupuestario, como el financiamiento de formación en salud.
A pesar de este avance, aún hay puntos críticos pendientes, como el artículo 131 sobre acuerdos de voluntades, el 32 sobre la creación del Consejo Nacional de Salud, y el 53 que aprueba pagos a las EPS.
Si el proceso mantiene este ritmo, podríamos ver una aprobación acelerada de la reforma de salud en el Legislativo próximamente.