La Gobernación del Meta decretó la calamidad pública por las afectaciones provocadas por el invierno en la VÍA AL LLANO y en 12 de sus municipios.
La medida busca que los gobiernos Nacional y Departamental destinen los recursos y ejecuten las acciones de manera prioritaria para atender los daños causados a las familias, por daños en cultivos y pérdida de animales. Así como las graves afectaciones económicas, sociales y ambientales también generadas por el taponamiento de esta importante carretera.
La decisión se toma horas después de que la ministra del Transporte, Ángela María Orozco, señalara que la vía permanecerá cerrada por lo menos tres meses, ante las dificultades que se presenta en la remoción del material que cae de la montaña en el kilómetro 58.
Los trabajos para retirar más de 30.000 metros cúbicos de escombros han sido retrasados porque, según informó Coviandes, las condiciones de seguridad no son las ideales para que los operarios.
El presidente Iván Duque anunció este miércoles que el próximo 25 de junio se realizará un consejo extraordinario de ministros en el Meta, con el objetivo de buscar medidas urgentes para solucionar la crisis que enfrenta esta región del país.
En días pasados la gobernadora del Meta, Marcela Amaya, y el alcalde de Villavicencio, Wilmar Barbosa, pidieron al Gobierno que decretara la calamidad pública en la región para atender todos los efectos de “la emergencia social, económica y ambiental que está viviendo el departamento del Meta y la región de los Llanos”.