En mayo se registró un escalofriante 29,9%, incrementando un 0,2% respecto al mes anterior.
Estos no son solo números fríos, son las historias de nuestros vecinos, amigos y familias que luchan día a día por encontrar una oportunidad de trabajo y llevar el sustento a sus hogares. Son los sueños de nuestros jóvenes frustrados, la experiencia de nuestros mayores desaprovechada, y el futuro de Arauca en la balanza.
Aunque el alcalde no tiene control directo sobre la creación de empleo, eso no significa que no haya nada que pueda hacer. En su papel como supuesto líder y servidor público, tiene la responsabilidad de promover políticas y programas que favorezcan la creación de empleo y el desarrollo económico.
Incentivar la inversión, fomentar el emprendimiento, mejorar la capacitación de nuestros trabajadores y, en general, generar un ambiente propicio para la economía local, están dentro de su órbita de influencia.
Nos preguntamos, ¿Dónde están las políticas de atracción de inversiones? ¿Dónde está el apoyo para los emprendedores locales? ¿Dónde están los programas de formación y capacitación para nuestros trabajadores? ¿Dónde está la promoción del desarrollo sostenible que garantice empleos a largo plazo?
La administración del alcalde puede y debe trabajar más para cambiar la preocupante realidad de desempleo que enfrentamos. Necesitamos un liderazgo fuerte, dispuesto a tomar medidas audaces y efectivas para mejorar las condiciones económicas y de empleo en nuestra ciudad.
Unámonos como ciudadanos de Arauca y exijamos a nuestros líderes acciones concretas, estratégicas y eficaces para reducir el desempleo y construir una ciudad con más oportunidades para todos.
Este debe ser uno de los temas principales de la agenda electoral que ayer inició en el país. La exigencia a los candidatos a todos los cargos de elección popular que se presentarán, debe ser contundente en esta materia. Porque el hambre, la miseria y las necesidades que muchas personas están sufriendo en este momento deberán movilizar el diálogo constructivo sobre propuestas reales.
El aparato productivo de Arauca se está viendo fuertemente lesionado y las consecuencias, de no intervenir pronto esta situación, acrecentarán las situaciones de violencia y criminalidad que han carecido de toda la atención de los líderes políticos.
Es urgente hacer algo ya.
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