El 3 de mayo es un día de reflexión global sobre la importancia del periodismo libre, independiente y seguro para la salud de nuestras democracias. Este Día Mundial de la Libertad de Prensa, conmemoramos a aquellos periodistas que han pagado con sus vidas la búsqueda de la verdad y recordamos la necesidad constante de luchar por un mundo donde la prensa pueda operar sin miedo ni represalias.
A lo largo de la historia, referentes mundiales han abogado por la libertad de prensa, cada uno de ellos marcando la importancia de esta causa. Thomas Jefferson, uno de los padres fundadores de los Estados Unidos, afirmó que preferiría tener periódicos sin gobierno, en lugar de un gobierno sin periódicos. En el siglo XX, el novelista y periodista británico George Orwell destacó el papel crucial de la prensa libre para desafiar a los autoritarios. Más recientemente, Amal Clooney, reconocida abogada de derechos humanos, ha defendido incansablemente la libertad de prensa en todo el mundo.
Lamentablemente, en Colombia, la libertad de prensa se ha visto amenazada en numerosas ocasiones. Los casos más representativos son aquellos que culminaron en el asesinato de periodistas, como Guillermo Cano Isaza, editor del periódico El Espectador, asesinado por el Cartel de Medellín; Jaime Garzón, famoso humorista y periodista, también asesinado por sicarios; y Flor Alba Núñez Vargas, periodista de radio asesinada en Pitalito, Huila.
En Arauca, un departamento de Colombia, la emisora Meridiano70 se ha convertido en un símbolo de resistencia frente a la censura y la violencia. Efraín Varela Noriega y Luis Eduardo Alfonso, dos de sus periodistas, fueron asesinados en represalia por su valiente cobertura de la corrupción y la violencia paramilitar. Sus muertes representan un ataque no solo a la libertad de prensa, sino a la esencia misma de la democracia.
Meridiano70, a pesar de haber recibido ataques en los últimos meses por parte de figuras ocultas que se esconden en las sombras del terror para amenazar, intimidar y censurar a este medio de comunicación, ha decidido enfocar todos sus esfuerzos en defender los derechos de las comunidades. Hemos experimentado y seguimos enfrentándonos a ataques cibernéticos destinados a bloquear y eliminar nuestros activos digitales, en un intento por impedir que nuestra audiencia y la sociedad colombiana conozcan la verdad a través de Meridiano70.
En Arauca, nos encontramos con instituciones estatales y administraciones locales que bloquean la pauta simplemente porque criticamos su forma inadecuada de gobernar. Lo más reciente es que una entidad estatal del nivel nacional ha sido utilizada por políticos regionales para acosar y hostigar a Meridiano70 con requerimientos temerarios y sin fundamentos técnicos.
Este medio se declara una vez más víctima de la violación de sus derechos para ejercer la libertad de prensa. Nuestras batallas las libraremos de la mano de nuestros aliados y nuestra audiencia, quienes continúan defendiéndonos, ya que de alguna manera nos consideran un recurso útil en la construcción de la paz en el territorio.
Es esencial que, en sociedades como la de Arauca y Colombia en general, que han estado plagadas de corrupción y manipulación política, la prensa mantenga informada a la sociedad sobre los abusos del poder. La prensa libre actúa como un contrapeso a los excesos gubernamentales y corporativos, proporcionando a los ciudadanos la información que necesitan para tomar decisiones informadas y responsables.
No obstante, la libertad de prensa conlleva una responsabilidad inherente: los periodistas deben respetar la verdad, los derechos de los demás y actuar con transparencia y rigor investigativo. La formación de criterio y la construcción de una sociedad libre e informada dependen en gran medida de un periodismo honesto y ético.
Ejercer la libertad de prensa implica un entendimiento profundo del contexto social, económico, filosófico y cultural de la sociedad a la que se sirve. Los periodistas tienen la responsabilidad de construir puentes y reducir las brechas de información, utilizando las nuevas tecnologías y fomentando el diálogo respetuoso y basado en la moral y los principios rectores que forman el pensamiento crítico.
Meridiano70, a pesar de los ataques y amenazas de aquellos que buscan silenciar sus voces, sigue luchando por defender los derechos de las comunidades y mantener informada a la sociedad colombiana. Invitamos a todos los ciudadanos a apropiarse de los medios de comunicación, hacer un buen uso de las tecnologías y participar en la conversación pública.
Hacemos un llamamiento a aquellos que se han declarado enemigos de Meridiano70 para que desistan de sus ataques y que la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) encuentre una mejor forma de procurar defender ese derecho que ostentan en su nombre. En este territorio olvidado, abandonado y condenado por la corrupción y la violencia, están pasando cosas y no es justo que solo la vean a través de los ojos de unos cuantos que tienen sus intenciones sesgadas hacia sus propios intereses. En Arauca, un territorio olvidado y acosado por los corruptos y los violentos, es crucial que la verdad sea contada desde múltiples perspectivas. Y para lograrlo basta con que se procuren garantías para poder ejercer esa libertad de prensa.
El periodismo valiente y ético en Arauca y en todo el mundo es la piedra angular de la construcción de la paz y el fortalecimiento de la democracia. En este Día Mundial de la Libertad de Prensa, celebremos y apoyemos a aquellos que arriesgan sus vidas en busca de la verdad y que trabajan incansablemente para garantizar que nuestras sociedades estén informadas y sean libres.
Editorial